Abraham

Hombres y mujeres de la Biblia

Abraham Introducción

Abram (‘Padre exaltado’) – Abraham (‘Padre de multitudes’). Nació en el 1950 a. C. en Ur, en Mesopotamia, donde vivió bajo el dominio neosumerio. Después partió a Harán, donde permaneció hasta la muerte de su padre, Taré.

Tras este suceso, y bajo las indicaciones de Dios, salió de Harán rumbo a Canaán. Tenía entonces 75 años.

En aquel tiempo, gran parte de Canaán estaba dominada por los amorreos. Sin embargo, no era un territorio unificado. Más bien, estaba constituido por numerosas ciudades-estado.

Entre 1875 y 1864 a. C., durante el reinado de Sesostris III (1878-1840 a. C.), vivió en Egipto.

Murió en 1775 a. C. a los 175 años, habiendo vivido en Canaán y en Egipto durante cien años.

La vida de este hombre se caracterizó por grandes demostraciones de fe y amistad con Dios. Por eso fue llamado “el amigo de Dios”, lo cual se atestigua por lo menos en tres ocasiones (2 Crónicas 20: 7; Isaías 41: 8; Santiago 2: 23). Sin duda, los hechos más relevantes de su vida fueron: la salida de Harán, siguiendo la orden de Dios, sin que se le informara el destino; creer en la promesa de que le nacería un hijo durante su vejez; y el valor de obedecer la orden de sacrificar a Isaac, su hijo.

También tuvo debilidades, como cualquier ser humano. Pero su unión con Dios las supera todas.

A través de su hijo Ismael es el padre del pueblo árabe y, por parte de Isaac, del pueblo hebreo.

Génesis 12:1-9

1 Jehová había dicho a Abram: «Vete de tu tierra, de tu parentela y de la casa de tu padre, a la tierra que te mostraré.
2 Haré de ti una nación grande, te bendeciré, engrandeceré tu nombre y serás bendición.
3 Bendeciré a los que te bendigan, y a los que te maldigan maldeciré; y serán benditas en ti todas las familias de la tierra».
4 Se fue Abram, como Jehová le dijo, y con él marchó Lot. Tenía Abram setenta y cinco años de edad cuando salió de Harán.
5 Tomó, pues, Abram a Sarai, su mujer, y a Lot, hijo de su hermano, y todos los bienes que habían ganado y las personas que habían adquirido en Harán, y salieron para ir a tierra de Canaán. Llegaron a Canaán,
6 y pasó Abram por aquella tierra hasta el lugar de Siquem, donde está la encina de More. El cananeo vivía entonces en la tierra.
7 Y se apareció Jehová a Abram, y le dijo: «A tu descendencia daré esta tierra». Y edificó allí un altar a Jehová, quien se le había aparecido.
8 De allí pasó a un monte al oriente de Bet-el, y plantó su tienda entre Bet-el al occidente y Hai al oriente; edificó en ese lugar un altar a Jehová, e invocó el nombre de Jehová.
9 Luego Abram partió de allí, avanzando poco a poco hacia el Neguev.

Génesis 15:1-16

1 Después de estas cosas vino la palabra de Jehová a Abram en visión, diciendo: –No temas, Abram, yo soy tu escudo, y tu recompensa será muy grande.
2 Respondió Abram: –Señor Jehová, ¿qué me darás, si no me has dado hijos y el mayordomo de mi casa es ese Eliezer, el damasceno?
3 Dijo también Abram: –Como no me has dado prole, mi heredero será un esclavo nacido en mi casa.
4 Luego vino a él palabra de Jehová, diciendo: –No te heredará este, sino que un hijo tuyo será el que te herede.
5 Entonces lo llevó fuera y le dijo: –Mira ahora los cielos y cuenta las estrellas, si es que las puedes contar. Y añadió: –Así será tu descendencia.
6 Abram creyó a Jehová y le fue contado por justicia.
7 Jehová le dijo: –Yo soy Jehová, que te saqué de Ur de los caldeos para darte a heredar esta tierra.
8 Abram respondió: –Señor Jehová, ¿en qué conoceré que la he de heredar?
9 Jehová le dijo: –Tráeme una becerra de tres años, una cabra de tres años y un carnero de tres años; y una tórtola y un palomino.
10 Tomó Abram todos estos animales, los partió por la mitad y puso cada mitad enfrente de la otra; pero no partió las aves.
11 Y descendían aves de rapiña sobre los cuerpos muertos, pero Abram las ahuyentaba.
12 A la caída del sol cayó sobre Abram un profundo sopor, y el temor de una gran oscuridad cayó sobre él.
13 Entonces Jehová le dijo: –Ten por cierto que tu descendencia habitará en tierra ajena, será esclava allí y será oprimida cuatrocientos años.
14 Pero también a la nación a la cual servirán juzgaré yo; y después de esto saldrán con gran riqueza.
15 Tú, en tanto, te reunirás en paz con tus padres y serás sepultado en buena vejez.
16 Y tus descendientes volverán acá en la cuarta generación, porque hasta entonces no habrá llegado a su colmo la maldad del amorreo.

Génesis 17:1-23

1 Abram tenía noventa y nueve años de edad cuando se le apareció Jehová y le dijo: –Yo soy el Dios Todopoderoso. Anda delante de mí y sé perfecto.
2 Yo haré un pacto contigo y te multiplicaré en gran manera.
3 Entonces Abram se postró sobre su rostro, y Dios habló con él, diciendo:
4–Este es mi pacto contigo: serás padre de muchedumbre de gentes.
5 No te llamarás más Abram, sino que tu nombre será Abraham, porque te he puesto por padre de muchedumbre de gentes.
6 Te multiplicaré en gran manera, y de ti saldrán naciones y reyes.
7 Estableceré un pacto contigo y con tu descendencia después de ti, de generación en generación: un pacto perpetuo, para ser tu Dios y el de tu descendencia después de ti.
8 Te daré a ti y a tu descendencia después de ti la tierra en que habitas, toda la tierra de Canaán, en heredad perpetua; y seré el Dios de ellos.
9 Dijo de nuevo Dios a Abraham: –En cuanto a ti, guardarás mi pacto, tú y tu descendencia después de ti de generación en generación.
10 Este es mi pacto, que guardaréis entre mí y vosotros y tu descendencia después de ti: Todo varón de entre vosotros será circuncidado.
11 Circuncidaréis la carne de vuestro prepucio, y será por señal del pacto entre mí y vosotros.
12 A los ocho días de edad será circuncidado todo varón entre vosotros, de generación en generación, tanto el nacido en casa como el comprado por dinero a cualquier extranjero que no sea de tu linaje.
13 Debe ser circuncidado el nacido en tu casa y el comprado por tu dinero, de modo que mi pacto esté en vuestra carne por pacto perpetuo.
14 El incircunciso, aquel a quien no se le haya cortado la carne del prepucio, será eliminado de su pueblo por haber violado mi pacto.
15 Dijo también Dios a Abraham: –A Sarai, tu mujer, no la llamarás Sarai, sino que su nombre será Sara.
16 Yo la bendeciré, y también te daré un hijo de ella. Sí, la bendeciré y vendrá a ser madre de naciones; reyes de pueblos nacerán de ella.
17 Entonces Abraham se postró sobre su rostro, y se rió y dijo en su corazón: «¿A un hombre de cien años habrá de nacerle un hijo? ¿Y Sara, ya de noventa años, habrá de concebir?»
18 Y dijo Abraham a Dios: –Ojalá viva Ismael delante de ti.
19 Respondió Dios: –Ciertamente Sara, tu mujer, te dará a luz un hijo y le pondrás por nombre Isaac. Confirmaré mi pacto con él como pacto perpetuo para sus descendientes después de él.
20 Y en cuanto a Ismael, también te he oído. Lo bendeciré, lo haré fructificar y multiplicar mucho en gran manera, engendrará doce príncipes y haré de él una gran nación.
21 Pero yo estableceré mi pacto con Isaac, el que Sara te dará a luz el año que viene por este tiempo.
22 Acabó Dios de hablar con Abraham, y se alejó de él.
23 Entonces tomó Abraham a su hijo Ismael, a todos los siervos nacidos en su casa y a todos los comprados por su dinero, a todo varón de la casa de Abraham, y circuncidó la carne del prepucio de ellos en aquel mismo día, como Dios le había dicho.

Génesis 21:1-13

1 Visitó Jehová a Sara, como había dicho, e hizo Jehová con Sara como le había prometido.
2 Sara concibió y dio a Abraham un hijo en su vejez, en el plazo que Dios le había dicho.
3 Al hijo que le nació, y que dio a luz Sara, Abraham le puso por nombre Isaac.
4 Circuncidó Abraham a su hijo Isaac a los ocho días, como Dios le había mandado.
5 Tenía Abraham cien años cuando nació su hijo Isaac.
6 Entonces dijo Sara: «Dios me ha hecho reir, y cualquiera que lo oiga se reirá conmigo».
7 Y añadió: «¿Quién le hubiera dicho a Abraham que Sara había de amamantar hijos? Pues le he dado un hijo en su vejez».
8 El niño creció y fue destetado, y ofreció Abraham un gran banquete el día que fue destetado Isaac.
9 Pero Sara vio que el hijo de Agar, la egipcia, el cual esta le había dado a luz a Abraham, se burlaba de su hijo Isaac.
10 Por eso dijo a Abraham: «Echa a esta sierva y a su hijo, porque el hijo de esta sierva no ha de heredar con Isaac, mi hijo».
11 Estas palabras le parecieron muy graves a Abraham, por tratarse de su hijo.
12 Entonces dijo Dios a Abraham: «No te preocupes por el muchacho ni por tu sierva. Escucha todo cuanto te diga Sara, porque en Isaac te será llamada descendencia.
13 También del hijo de la sierva haré una nación, porque es tu descendiente».

Génesis 22

1 Aconteció después de estas cosas, que Dios probó a Abraham. Le dijo: –Abraham. Este respondió: –Aquí estoy.
2 Y Dios le dijo: –Toma ahora a tu hijo, tu único, Isaac, a quien amas, vete a tierra de Moriah y ofrécelo allí en holocausto sobre uno de los montes que yo te diré.
3 Abraham se levantó muy de mañana, ensilló su asno, tomó consigo a dos de sus siervos y a Isaac, su hijo. Después cortó leña para el holocausto, se levantó y fue al lugar que Dios le había dicho.
4 Al tercer día alzó Abraham sus ojos y vio de lejos el lugar.
5 Entonces dijo Abraham a sus siervos: –Esperad aquí con el asno. Yo y el muchacho iremos hasta allá, adoraremos y volveremos a vosotros.
6 Tomó Abraham la leña del holocausto y la puso sobre Isaac, su hijo; luego tomó en su mano el fuego y el cuchillo y se fueron los dos juntos.
7 Después dijo Isaac a Abraham, su padre: –Padre mío. Él respondió: –Aquí estoy, hijo mío. Isaac le dijo: –Tenemos el fuego y la leña, pero ¿dónde está el cordero para el holocausto?
8 Abraham respondió: –Dios proveerá el cordero para el holocausto, hijo mío. E iban juntos.
9 Cuando llegaron al lugar que Dios le había dicho, edificó allí Abraham un altar, compuso la leña, ató a Isaac, su hijo, y lo puso en el altar sobre la leña.
10 Extendió luego Abraham su mano y tomó el cuchillo para degollar a su hijo.
11 Entonces el ángel de Jehová lo llamó desde el cielo: –¡Abraham, Abraham! Él respondió: –Aquí estoy.
12 El ángel le dijo: –No extiendas tu mano sobre el muchacho ni le hagas nada, pues ya sé que temes a Dios, por cuanto no me rehusaste a tu hijo, tu único hijo.
13 Entonces alzó Abraham sus ojos y vio a sus espaldas un carnero trabado por los cuernos en un zarzal; fue Abraham, tomó el carnero y lo ofreció en holocausto en lugar de su hijo.
14 Y llamó Abraham a aquel lugar «Jehová proveerá». Por tanto se dice hoy: «En el monte de Jehová será provisto».
15 Llamó el ángel de Jehová a Abraham por segunda vez desde el cielo,
16 y le dijo: –Por mí mismo he jurado, dice Jehová, que por cuanto has hecho esto y no me has rehusado a tu hijo, tu único hijo,
17 de cierto te bendeciré y multiplicaré tu descendencia como las estrellas del cielo y como la arena que está a la orilla del mar; tu descendencia se adueñará de las puertas de sus enemigos.
18 En tu simiente serán benditas todas las naciones de la tierra, por cuanto obedeciste a mi voz.
19 Regresó Abraham adonde estaban sus siervos, y juntos se levantaron y se fueron a Beerseba. Y habitó Abraham en Beerseba.
20 Después de estas cosas se anunció a Abraham: «Milca ha dado a luz hijos a tu hermano Nacor:
21 Uz, el primogénito; Buz, su hermano; Kemuel, padre de Aram;
22 Quesed, Hazo, Pildas, Jidlaf y Betuel».
23 Betuel fue el padre de Rebeca. Estos son los ocho hijos que Milca dio a luz de Nacor, hermano de Abraham.
24 Y su concubina, que se llamaba Reúma, dio a luz también a Teba, a Gaham, a Tahas y a Maaca.

Génesis 25:1-11

1 Abraham tomó otra mujer, cuyo nombre era Cetura,
2 la cual le dio a luz a Zimram, Jocsán, Medán, Madián, Isbac y Súa.
3 Jocsán engendró a Seba y a Dedán; e hijos de Dedán fueron Asurim, Letusim y Leumim.
4 E hijos de Madián: Efa, Efer, Hanoc, Abida y Elda. Todos estos fueron hijos de Cetura.
5 Abraham dejó a Isaac todo cuanto tenía.
6 A los hijos de sus concubinas les dio Abraham regalos; pero, cuando aún vivía, los separó de su hijo Isaac enviándolos hacia las tierras del oriente.
7 Los días que vivió Abraham fueron ciento setenta y cinco años.
8 Exhaló, pues, el espíritu, y murió Abraham en buena vejez, anciano y lleno de años; y fue reunido a su pueblo.
9 Lo sepultaron Isaac e Ismael, sus hijos, en la cueva de Macpela, en la heredad de Efrón hijo de Zohar, el heteo, que está enfrente de Mamre,
10 la heredad que compró Abraham de los hijos de Het. Allí fueron sepultados Abraham y Sara, su mujer.
11 Y sucedió, después de muerto Abraham, que Dios bendijo a Isaac, su hijo; y habitó Isaac junto al pozo del «Viviente-que-me-ve».