Juan 5:1-9

1 Después de esto había una fiesta de los judíos, y Jesús subió a Jerusalén.
2 Hay en Jerusalén, cerca de la Puerta de las Ovejas, un estanque, llamado en hebreo Betesda, el cual tiene cinco pórticos.
3 En estos yacía una multitud de enfermos, ciegos, cojos y paralíticos, que esperaban el movimiento del agua,
4 porque un ángel descendía de tiempo en tiempo al estanque y agitaba el agua; el que primero descendía al estanque después del movimiento del agua quedaba sano de cualquier enfermedad que tuviera.
5 Había allí un hombre que hacía treinta y ocho años que estaba enfermo.
6 Cuando Jesús lo vio acostado y supo que llevaba ya mucho tiempo así, le dijo: –¿Quieres ser sano?
7 El enfermo le respondió: –Señor, no tengo quien me meta en el estanque cuando se agita el agua; mientras yo voy, otro desciende antes que yo.
8 Jesús le dijo: –Levántate, toma tu camilla y anda.
9 Al instante aquel hombre fue sanado, y tomó su camilla y anduvo. Era sábado aquel día.